"El canon literario por su parte ha venido idealizando la mujer en su imaginidad pureza mientras que al mismo tiempo la margina y demoniza cuando no se subordina a la autoridad masculina. No ocurre esto, sin embargo, en 'Cien años de soledad. A pesar de que la crítica ha venido afirmando que se puede clasificar a los personajes femeninos según la dictomía citada, un relectura a la luz tanto de la teología feminista como de la mitología potencia una interpretación mucho más matizada."